DOMINGO XVI DEL TIEMPO ORDINARIO




RESUMEN HOMILIA DOMINGO 16 ORDINARIO  (A)

La Biblia dice: “Dios miró lo que había hecho y era bueno.”
Dios hizo al hombre libre y responsable, y le dio un Mandamiento: el Amor.
El demonio pone el mal en el corazón de las personas.
Nuestra Meta debe ser siempre: Dios.
Pero somos débiles, ambiciosos y nos apartamos de Dios.
Dios sigue amándonos, tiene una paciencia infinita, sigue llamándonos.
La hierba mala no se puede convertir en trigo, pero el hombre si puede cambiar.
El hijo se arrepintió y volvió a la casa del padre.
Nosotros debemos rechazar el mal, pero sin hacer daño a las personas.
Debemos vigilar para que el enemigo no siembre el mal en nuestros corazones.
Dios, que sigue amándonos, espera hasta el último día para separar el bueno del malo.
Nosotros: vigilar, rechazar, obrar con amor. y orar para que desaparezca el mal.
Este es tiempo de Misericordia, quien la rechaza, el mismo se ha condenado.


                           DOMINGO 16 DEL TIEMPO ORDINARIO  (A)

PRIMERA LECTURA

Lectura del libro de la Sabiduría.  (12, 13. 16-19)

Tú eres el único Dios, no hay otro. Tú cuidas de todo. Tú eres perfectamente justo y obras siempre bien. Tu poder es el principio de la Justicia; como eres el dueño de todas las cosas, puedes también perdonarlas. Manifiestas tu fuerza a los que dudan de tu poder total y castigas a los que lo atacan. Pero, aunque eres un Señor poderoso, tú juzgas con calma y nos gobiernas con mucha paciencia, porque eres libre de hacer  lo que quieres. Obrando así enseñaste a tu pueblo que el justo debe amar a todos los hombres, y diste a tus hijos la dulce esperanza de que después del pecado les permites el arrepentimiento.
Palabra de Dios.

R.-Te alabamos Señor.

SALMO RESPONSORIAL  85, 5-6. 9-10

R.-TÚ, Señor, eres bueno y compasivo.

Tú, Señor, eres bueno y compasivo.
Grande en misericordia con las personas que te llaman.
Señor, escucha mi oración, ayuda mi petición.

R.-Tú, Señor, eres bueno y compasivo.

Todas las personas vendrán
a la presencia del Señor,
bendecirán tu nombre
Tú eres grande y haces cosas maravillosas.
Tú eres el único Dios.

R.-Tú, Señor, eres bueno y compasivo.

Tú, Señor, eres compasivo y misericordioso,
lento en enfadarse y pronto en perdonar.
Señor, mírame, ten compasión de mí.

R.-Tú, Señor, eres bueno y compasivo.

SEGUNDA LECTURA

Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Romanos. (8, 26-27)

Hermanos: El Espíritu viene en ayuda de nuestra debilidad, por que nosotros no sabemos pedir las cosas que de verdad necesitamos, pero el mismo Espíritu pide por nosotros.
Dios, que mira los corazones, sabe que desea el Espíritu, y que su petición por nosotros es de acuerdo con Dios.
Palabra de Dios.

R.-Te alabamos Señor.

EVANGELIO

Lectura del santo evangelio según san Mateo. (13, 24-30)

En aquel tiempo Jesús les dijo esta parábola: “El Reino de los cielos es igual que un hombre que sembró en su campo buena semilla de trigo. Por la noche, cuando estaban durmiendo, vino un hombre, enemigo suyo, y sembró cizaña entre la semilla del trigo y se fue. Cuando el trigo nació y creció, creció también la cizaña. Los criados vieron la cizaña y fueron a decirle al amo del campo: “Señor, tú sembraste buena semilla de trigo. ¿Cómo hay también cizaña junto al trigo?
El Señor les dijo: “Eso lo hizo un hombre que es enemigo mío.” Le dijeron los criados: “Quieres que nosotros vayamos al campo y quitemos la cizaña?”
El Señor les dijo: “No, porque al quitar la cizaña pueden arrancar también el trigo. Es mejor dejar crecer juntos el trigo y la cizaña hasta el día de la siega; y yo diré a los trabajadores: “Cojan primero la cizaña y sepárenla para quemarla al fuego; el trigo llevarlo a guardar a mi granero.”
Palabra del Señor.

R.-Gloria a ti, Señor Jesús.